¿eres olvidable?
Posted by luis | Posted in calle, olvidable, recuerdo, S | Posted on 9:16:00 a. m.
Despierto un jueves cualquiera, tarde para variar, con una canción de Duncan Dhu rebotando en mi cabeza, hace tiempo que no la escucho, pero se resiste a irse de mi pensamiento. La tarareo recordando cada línea como si la estuviera cantando, intento sacar las notas en la guitarra. Quizá alguien está pensando en mí, mientras escucha la canción, me miento. Me pregunto, cuán olvidable puedo ser...
Me gustaría que sea, S, quien piense en mí, pero se alejó casi huyendo, y ayudaron todos para que mi recuerdo no se mencione bajo ningún pretexto. Su viejo, su vieja, sus hermanas, los estúpidos de sus cuñados, se ofrecieron como voluntarios para enterrarme en el olvido. Ella no se opuso. Para colmo, se fue sin despedir, no la culpo, yo hubiera hecho lo mismo.
“S” está pensando en mí, me mentí, sabiendo que mentía, y que la sonrisa estúpida en mis labios, no tenía justificación alguna, no podemos elegir quien piense en nosotros, mucho menos si eres, para alguien, menos que un mal recuerdo en su pasado. La última vez que supe de ella, estaba en Indiana. Fue desde ahí y por un e-mail que me pidió no molestarla más.
Me gusta pensar que S camina, lejos de mí, literalmente y que cuando escucha una canción de Oasis, piensa en mi, cuando vencida por los influjos del alcohol, me acompaña a leer sus cartas, o cuando el aire sopla fuerte y la despeina, lo cual es fácil, (¿no es cierto?), o cuando su teléfono suena una sola vez, simulando una ridícula clave, sonríe y piensa en mi.
Cuando uno está enamorado, se empeña construyendo claves, códigos secretos que solamente conoce tu pareja, señales de humo que, según ustedes, sobrevivirán al inefable viento del olvido. Es fácil, de esta manera que salgan a la luz lugares comunes, llenas las conversaciones con frases trilladas, canciones, que pretenden recordarse uno al otro por siempre. Nunca digas siempre, dice Renato Cisneros.
Y al final, cuando al punto final, valga la redundancia que permite el buen Sabina, no le siguen dos puntos suspensivos, se pregunta uno, en que momento se jodió todo, qué mal intencionado duende siempre sea una palabra tan grande que al final no signifique nada. Al final y sin puntos suspensivos, lo único que queda es la distancia, para arropar nuestro corazón que no siente la ausencia que no ve.
Existimos por que alguien piensa en nosotros, y no al revés. Es una frase de “Princesas” una película que vi a medias, mientras el jueves se moría sin reproches. No puedo evitar pensar en ti, martillaba la canción de Duncan, todavía en mi cerebro, y esa noche sueño que S sonríe por que se le ha ocurrido que puedo estar pensando, como siempre y para variar, en ella.
Y TU ESTIMADO LECTOR QUE NOS ACOMPAÑAS ¿CUÁN OLVIDABLE PIENSAS SER?
La foto, no tengo idea quien la tomó. No hay video, hasta que se me pase la bronca o venga la inspiración, lo que ocurra antes...
mi querido luis, a tu pregunta de cuan olvidable quiero ser, pues no lo sé, la verdad no se si pretendo que me recuerden, creo que es consecuencia de nuestras acciones, y mientras te escribo esto te cuento que por poco y no escribo estas lineas, una bajada de presión me asutó a tal punto de pensar que ya no daba para más, y no es broma, este post es cuasi circunstancial, ver si quiero ser recordado o que estos haciendo para ello, como te digo mi amigo, solo los demás podrán considerar si somos facil de olvidar o no. Y bueno quien no ha tenido a alguna S en su vida, tal vez en este momento este al otro lado de la vereda pensando en que alguien está pensando en ella, ese alguien talvez no seas tu ni yo, será otro.
Buen blog, aquí dejo mi impronta
Un saludo
Hace días tambien me desperte escuchando una canción de duncan dhu que no había escuchado hace tiempo... me gusta... se llama "voy detrás de ti".
Me gusta como escribís,Luis.
Yo creo en eso que te gusta pensar,que hay ciertas cosas que al otro seguramente lo harán recordar,un tema musical, encontrarse de pronto con una fotografía, un sueño, o vaya a saber uno qué.Lo"trágico "es que nunca vamos a enterarnos en que momento ocurren estas cosas.
Con respecto a tu pregunta, solo deseo ser inolvidable, el día de mañana ,para mis hijos.
Saludos .
Ay Luis, sé, con todo seguridad, que hay quienes ni siquiera recuerdan olvidarme.
Sé que durante todos estos años en los que el empeño de mi memoria no le daba descanso a mi alma, la recordada se desenvolvía naturalmente sin evocaciones a mi persona.
Pero también creo que ella se lleva, como un rastro que no la deja sola, mi recuerdo persistente.
De ahí que me salieron unos torpes versos que quieren gritar esa absurda obstinación...
...como si algún día ella fuera a leerlos.
Hola Luis, yo tengo el raro privilegio de ser olvidada por los que recuerdo, y recordada por los que olvidé. Raro el destino, ¿no?
Un beso, Graciela