Es culpa mía
Posted by luis | Posted in | Posted on 9:38:00 p. m.

Hace 21 horas que se fue el sábado, y con él se fue usted. Sin oportunidad de despedirme y cual arquero que deja pasar un gol increíble, acepto aquí las faltas que sin ninguna intención he cometido para provocar su ausencia injustificada. Emerjo de mi tristeza para aceptar mi culpa en toda nuestra historia.
Soy culpable por no parecer interesante ante sus ojos. Estoy perdiendo mis poderes para gustarle a alguien, le dije anoche a un primo, cuando me descubrió solo en el bar adonde fuimos. Eso no se debe perder nunca, pero alguien me ha colgado sobre el pecho un collar imaginario de criptonita que no sé como vencer con palabras.
Con las palabras muertas, el camino hacia su corazón se ha convertido en un enorme espiral que mis pasos repiten sin sentido. Fue un error besarte, dijo sin piedad alguna, y me di cuenta que el castillo de arena que había construido, lo derrumbaba sin arrepentimiento alguno, y las palabras para contestar eso, no aparecieron nunca.
No quedaron ganas para preguntar entonces, que diablos pretendía besándome entonces. Nunca pude provocar, de su parte, una llamada a media noche para decirme que no podía dormir. Tampoco provoqué las ganas de devolverme las llamadas. Culpa mía, seguramente. Mía y de mi casi inexistente talento para capturar sus pensamientos.
Culpa mía el no poder olvidar el no-quiero-nada-serio-contigo y así intentar arrastrarla al país de “riesgolandia” donde usted se animaría a quererme. Mi falta de cariño, como llama a mi necesidad de verla, me traicionó otra vez, y se ha repetido, con típica frecuencia, diría yo, la estadística esa que dice que en una relación siempre hay uno más comprometido que el otro, y ese uno siempre soy yo.
Tampoco desperté en usted el sentimiento de “acompáñame aunque sea un ratito más”. Mis tácticas para acompañarla a casa, sin otro ánimo que conocer´la, fallaron una sobre otra. Aunque me pone triste el enorme saldo en rojo de mis intentos por conquistarla, sé que al menos, me enamoré como debe enamorarse uno.
Porque estaba un poco enamorado de usted, y de sus ganas de ocultarme donde vivía y de su inmenso talento para no dejarse querer, y de su estupenda táctica de evasivas y pretextos para no verme nunca. Culpa mía el no respetar su espacio, culpa mía fue extrañarla sin que se acuerde de nada, incluyendo fechas ridículas, como mi cumpleaños.
Y viera que a pesar de todo, no hay resentimiento, tal como usted sospecha. No tengo derecho a molestarme con usted. Estoy, más bien, molesto conmigo, por ilusionarme una vez más y sin sustento. Y así como el buen Sabina dice que al punto final de la pasión no le siguen dos puntos suspensivos, pongo punto final a esta carta, a mi pena,y le envío deseándole suerte y sin necesidad que acuse recibo, el beso que quise darle siempre y el abrazo que anoche me negó.
ESTA ES UNA CANCION QUE NOEL GUSTA DE CANTAR CUANDO BORRACHO EL Y TRISTE YO.
No sé de qué hablas pero está bueno hacer autocrítica de vez en cuando. Te dejo un beso!
Terrible!!! Ser soy siempre el que más quiere en cada relación, puese ser malo para el ego pero, según veo, es muy bueno para la inspiración literaria. Me encantó ete post. Un beso Graciela
Que tal, te leo hace tiempo, muy bueno lo que escribes, realmente; pasaba por aca para hacerte llegar una invitación, pasa por mi blog para que te enteres de toda la situación, saludos... te espero en mi blog...
http://elperrocanalla.blogspot.com/